La inteligencia emocional (IE)…
Este es un concepto antiguo donde se puede aprender o adquirir con el tiempo de acuerdo a las experiencias que vayamos teniendo.
Podemos decir que la Inteligencia Emocional es la capacidad que adquirimos para regular nuestras emociones y ofrecer respuestas adecuadas en momentos de alta tensión. Las partes del cerebro que nos permiten tener y controlar las emociones son la amígdala y el neocórtex, la amígdala se encarga de las emociones más primigenias que podemos tener, el neocórtex procesa la información que recibimos a través de los sentidos.
Existen dos formas elementales de inteligencia emocional.
- Inteligencia interpersonal. Implica entender y comprender las emociones de los otros y tener la habilidad de reaccionar según el estado anímico del otro.
- Inteligencia intrapersonal. Implica entender y comprender las propias emociones, de tenerlas en cuenta al momento de tomar decisiones y ser capaz de regular las emociones según la situación.
La inteligencia emocional es importante y fundamental en nuestra vida, ya que desempeña un papel principal en el éxito o fracaso en todo tipo de relaciones humanas desde sentimentales hasta laborales.
Algo que debemos tener claro y que es esencial para conocer mejor el tema de la inteligencia emocional, son las emociones, pero… ¿Qué son?
La palabra emoción proviene del latín “emovere” que significa agitar. Las emociones son respuestas de agitación, que implican una conmoción física. Nos mueven a hacer cosas y sin ellas, aunque supiéramos lo que tenemos que hacer no lo haríamos. Si bien las emociones “positivas” son dos (alegría y amor) y nos proporcionan vivencias de bienestar, también las emociones “negativas” (miedo, tristeza, enojo) son buenas, ya que nos movilizan para alejarnos o intentar cambiar las situaciones que nos pueden perjudicar. Las emociones tienen una “utilidad ancestral de adaptación”, es decir, favorecen la autodefensa y la supervivencia. Las emociones negativas son útiles ante el peligro porque nos empujan a actuar (atacando, huyendo, buscando una solución). Aunque sean desagradables, son necesarias.
Las emociones juegan un papel importante en nuestra vida, que nos ayudan aprender de las vivencias que vamos teniendo, cuando generamos experiencias nuestro cerebro no solo retiene el momento si no también los sentimientos generados por ese evento, esto nos sirve para aprender y al tener una experiencia no agradable las emociones serán las encargadas de evitar que vuelva a suceder.
También nos ayudan a relacionarnos con los demás, ya que al saber identificar los sentimientos del otro nos sirve de guía para identificar como va a reaccionar, que le genera la situación por la que están pasando, etc.
Y finalmente, las emociones te ayudan a actuar, se necesita de las emociones para poder reaccionar de manera inmediata ante una situación de peligro, felicidad, alerta, etc.
Las emociones son herramientas importantes para entender e interactuar con nuestro entorno, pero si no sabemos manejarlas de la manera correcta también nos pueden llevar a reaccionar de manera impulsiva y cometer errores, en este punto es donde entra la inteligencia emocional.
La inteligencia emocional puede evolucionar y aumentar con la práctica, te compartimos 4 tips para que comiences a desarrollar esta habilidad.
1. Presta atención a tus emociones: Solemos estar muy activos durante el día con nuestras actividades que olvidamos prestar atención a lo que sentimos, por lo que es importante detenerte un segundo e identificar como te sientes ante dicha situación. Dato: Si te cuesta hacer esto, pon una alarma cada cierta hora y detente dos minutos a examinar tus emociones y de a poco se hará un habito.
2. Aprende a manejar tus emociones: Hay que evitar saltar a conclusiones negativas de manera inmediata, es complicado cambiar el estado de ánimo de manera inmediata, es por ello que cuando algo te genere un malestar trates de despejar tu mente haciendo un paseo, escuchar música, respirar profundo y demás actividades que te relajen.
3. Expresa como te sientes: La capacidad de expresar es esencial para mantener relaciones personales, hay diferentes maneras de expresarlo, no necesariamente con palabras, también con acciones, actos de servicio, gestos e incluso con el lenguaje corporal.
4. Asume la responsabilidad por tus actos. Este punto puede resultar difícil, pero si aceptas que eres responsable de cómo te sientes y como te comportas, te ayudara de manera positiva en todas las áreas de tu vida.
Tus emociones y comportamientos provienen de ti, por lo tanto, no hay ningún responsable más que tú, eres el encargado de decidir como tomas e interpretas las situaciones que vives.
Desarrollar la inteligencia emocional no es una tarea sencilla, requiere tiempo y paciencia, además es algo que se tiene que trabajar a diario porque no es una constante, a diario vivimos diferentes situaciones y experimentamos diversas emociones, es por ellos que tenemos que poner en constante práctica los tips que te presentamos, no es algo fácil pero tampoco es nada imposible.
“Cualquiera puede enfadarse, eso es algo muy sencillo. Pero enfadarse con la persona adecuada, en el grado exacto, en el momento oportuno, con el propósito justo y del modo correcto, eso, ciertamente no resulta tan sencillo” -Aristóteles.
Fuente:BBCNEWS